La internacionalización es uno de los rasgos identitarios del Sistema de Universidades Estatales que se busca consolidar y desarrollar de manera colaborativa entre las instituciones estatales de educación superior. Para conocer en mayor detalle el avance realizado en este ámbito, conversaremos con Carla Gutiérrez, la Directora de Internacionalización de la Universidad de O’Higgins.
Uno de los objetivos del aspecto de internacionalización del proyecto Ethos es un análisis estratégico comparado con referentes internacionales, el cual se realizó en el primer semestre de este año, ¿a qué conclusiones llegaron?
Se ha hecho este análisis estratégico a través del proceso que hemos llevado en la Mesa de Internacionalización del Consorcio Universidad Estatal de Chile. Hemos ido evaluando algunos parámetros, tratando de ordenar en qué estado de desarrollo está la internacionalización de las universidades estatales, y creemos que tenemos una buena base, sin embargo, nos falta trabajo asociativo para poder apuntar a un desarrollo mayor.
Es decir, que cada universidad estatal, aparte de trabajar el área por sí misma e independientemente de la otra institución, pueda conformar a través del CUECH, una acción, un eje estratégico internacional por medio de un trabajo conjunto y asociativo.
Otro aspecto que hemos visto es la necesidad de potenciar el inglés, el cual es un factor que hace tiempo se ha implicado como determinante, pero todavía no se han realizado acciones más activas para poder incorporar el factor del idioma en la formación, sobre todo en el posgrado.
Asimismo, hay que comprender que la internacionalización no es un objetivo en sí, sino que es un camino para lograr la excelencia académica, debido a que esta nos permite poder interactuar con otros países e instituciones. En ese sentido, se puede enriquecer el avance en el conocimiento, en el desarrollo de la formación profesional, junto con el acceso a tecnologías y procesos que pueden estar sucediendo en otras partes del mundo.
Recientemente se ha firmado un memorándum entre el CUECH y el Consorcio Interuniversitario Nacional de Argentina, ¿por qué es importante firmar este tipo de acuerdos?, ¿qué aspectos destacan de la educación superior República Argentina que pueden ser relevantes para Chile?.
Hemos discutido en este proceso que el objetivo final es encontrar e identificar factores para generar nuevas perspectivas y reflexiones, en este caso para la internacionalización. Por lo tanto, este proceso no concluye con la obtención de un convenio, sino que es uno de tantos instrumentos que sirven en función de cumplir este fin.
El motivo para establecer un convenio con las universidades argentinas se debe a que es una expresión formal que queda informada para todas las instituciones de ambos grupos en donde se expresa la voluntad de trabajar en asociatividad, que es lo que estaba mencionando antes. Es decir, para trabajar a nivel grupal en colaboración con otro país, es necesario plantear una base que permita dar el puntapié inicial.
Eso nos enmarca en un trabajo conjunto, si no tuviésemos este tipo de instrumento sería una situación que podría suceder de manera orgánica, pero no garantizaría que estemos posicionando esto dentro de un plan de trabajo. En ese convenio se definen cuáles son los lineamientos y el objetivo, generando una pauta que orientará el trabajo a futuro, el cual se puede entender a corto, mediano y largo plazo, a través de esta estructura.
Otra razón para colaborar con las universidades argentinas fueron las definiciones que realizamos para ver con qué países y/o regiones teníamos mayor interés en colaborar. Una de nuestras conclusiones fue la importancia de fortalecer la colaboración latinoamericana. Estamos más carentes de estructuras de colaboración, ya sean programas, fondos, financiamiento e instrumentos, especialmente en comparación con Europa u otros países que disponen de una buena articulación más madura.
Es decir, a través de este tipo de convenios puede surgir una base para asociarnos regionalmente, solucionar las carencias que tenemos a nivel de cooperación latinoamérica y potenciar el trabajo colaborativo.
Argentina es un excelente punto de partida para poder iniciar esta colaboración, una de las razones es por un tema territorial debido a que es nuestro país vecino, a esto hay que destacar la tradición que tienen sus universidades estatales y el ser un país que financia la educación. De eso podemos aprender mucho, precisamente en este momento en el cual, como país, estamos tratando de hacer una transición en esa dirección.
¿Por qué es importante fortalecer la cooperación Sur-Sur?, en vez de simplemente potenciar la relación con el norte, con Europa, Canadá, Estados Unidos.
Es importante ver esto como cooperación Sur-Sur, porque nos damos cuenta de que identificamos problemáticas similares en países con un nivel de desarrollo similar al nuestro y eso nos hace poder dar pasos en conjunto. Si seguimos sólo en la cooperación con el norte, es difícil posicionarse de otra manera porque han sido procesos y tiempos distintos.
Entonces, para poder nosotros, desde nuestra realidad y proceso de internacionalización en particular, creemos que es más valioso empezar a tener una mayor relación con países más acordes a nuestro proceso de desarrollo y con necesidades similares, para que en conjunto podamos ir haciendo avances.
Sabemos que es necesario hacer este trabajo colaborativo, no podemos estar aislados, si cada país va por su cuenta por separado, si no los potenciamos, no va a haber un gran desarrollo a nivel regional, y como estamos hablando de un tema internacional, tenemos que poder llegar a trabajar de manera articulada a nivel global.
Todos necesitamos de todos, lo cual nos puede ayudar a poder desarrollarnos en el entorno global desde un punto de vista territorial.
Para finalizar, ¿cuál es su apreciación del trabajo realizado por el CUECH en este tipo de proyectos?
Creo que a nivel nacional el esfuerzo de hacer el proyecto Ethos y que nos haga reflexionar y repensar el tema me parece muy positivo, se resaltan los objetivos que tenemos a nivel de universidades estatales y nos ayuda a pensar cómo trabajar asociativamente. De lo contrario, sería difícil nosotros iniciar ese punto de partida, así que también celebro que el Consorcio Universidad Estatales de Chile esté tomando ese liderazgo y nos invite a participar de un proyecto como este.
Nos deja con el desafío y la responsabilidad de que esto tome su curso, y que no quedemos solo en palabras. Como universidades estatales debemos ir tomando iniciativa para que no quede en algo estático o dormido, sino que de esto surja una acción de plan conjunto.
Para eso es indispensable poder contar con financiamiento que nos permita realizar estos objetivos, si queremos establecer articulación asociativa y queremos construir, proponer e incluso diseñar programas, necesitamos un instrumento financiero que permita, por lo menos, generar la primera instancia de un plan de trabajo conjunto.
Chile tiene un gran potencial, no es típico que un país tenga casi 5000 kilómetros de largo, con una diferencia climática, cultural y de territorio, donde podemos explorar muchísimo más, específicamente en investigación, la cual es muy atractiva a nivel internacional debido a las particularidades de los diversos espacios del país.
Entonces, si no potenciamos este trabajo común asociativo entre las universidades estatales, a través de nuestra diversidad y diferencias, estaríamos perdiendo una oportunidad importante para poder posicionarnos como país.