En la investigación desarrollada por el proyecto Ethos para encontrar rasgos comunes entre las universidades estatales, concluyó que uno de los sellos compartidos es la vinculación territorial. El profesor Osvaldo Bernales, directivo de la Dirección General de Vinculación con el Medio de la Universidad de Los Lagos, nos explica por qué la Vinculación Territorial es un sello distinto de las universidades estatales.
Hoy día todas las universidades estatales hablan de vinculación territorial, en ese sentido, ¿existen elementos comunes en las 18 universidad estatales?
Este es un trabajo reciente que viene haciendo la red de vinculación con el medio de las universidades del Estado, particularmente del 2016 en adelante, en el cual se hizo una reflexión a nivel del Sistema de Universidades del Estado, sobre qué significaba la vinculación con el medio como función universitaria, tanto en su necesaria integración al interior de la propia institución.
Es decir, cómo la vinculación con el medio deja de ser una función complementaria, sino que es inherente y hay que entenderla integrada en la docencia, la investigación, la extensión artístico cultural y en la comunicación.
La posición que tienen las universidades del Estado en materia de territorio, en el ámbito de la vinculación con el medio, es considerar el territorio como el entorno significativo de la institución, en donde hace sentido la acción de esta universidad, que puede ser una acción preferente en donde está emplazada, pero también en una acción colaborativa con otras universidades que tienen capacidades que se pueden sumar a esa acción universitaria, con un pilar que nosotros le hemos denominado la colaboración y la cooperación entre las universidades que conforman el sistema estatal.
En ese marco, hay conciencia en el sentido de que el territorio es un concepto que va más allá de lo geográfico funcional, es una dimensión política del desarrollo de comunidades humanas que quieren bienestar, avanzar en su calidad de vida y en donde el compromiso de las universidades del Estado es la construcción de esa solución. Y, desde la identidad estatal, concurrimos a esos desafíos con la pluralidad y la idea de dialogar para generar bienes y fines públicos con esa comunidad.
Es el territorio el que nos cohesiona, tensiona, nos pone en conflicto respecto de cuál es el camino a seguir. Esto pasa, por ejemplo, cuando se discuten los planes reguladores, de desarrollo comunal, los planes estratégicos regionales y de innovación en cada una de las regiones, pero también ocurre en el plan estratégico institucional de cada universidad estatal.
Es decir, son instrumentos estratégicos de planificación que se tienen que conectar y articular en base a la coherencia y consistencia de las políticas de las distintas instituciones, en este caso gobiernos regionales, municipios, sectores, gremios y universidades.
Esto converge en un concepto de territorio que para las universidades del Estado es dinámico, es un concepción que desafía a la universidad, su capacidad de adaptación y comprensión permanentemente de estos cambios. Al ser territorios dinámicos y construcciones sociales más que su sentido tradicional geográfico, las universidades tienen que desplegar toda su capacidad para ir leyendo de manera prospectiva dónde están las brechas, las oportunidades, para una mejor toma de decisiones.
Se puede decir que las universidades estatales son una expresión del Estado en el territorio, por lo tanto, ¿qué se requiere para profundizar su incidencia?, ¿en qué situación están hoy día la universidad estatales?
Yo no me imagino una universidad estatal contemplativa, pienso en un Sistema de Universidades del Estado que actúa en el territorio y que es incidente.
Por eso es importante el concepto de la doble incidencia, el cómo integramos este ámbito institucionalmente, y eso significa que tenemos que generar mayores y mejores prácticas de articulación y coordinación entre las áreas de vinculación y de docencia, por ejemplo entregando a nuestros estudiantes herramientas de vinculación con el medio o generando investigación que debiera tender a resolver problemas a nivel territorial..
Por eso mismo hay que realizar un diagnóstico territorial, debido a que esta herramienta te indica exactamente dónde están las brechas, las potencialidades, oportunidades y puedes hacer foco con más precisión respecto de los esfuerzos que va a hacer una universidad a través sus variadas áreas. Por lo tanto, a partir de eso las acciones se vuelven más pertinentes, le hacen más sentido a la comunidad y eso es una manera de dar garantías y evidenciar el aseguramiento de la calidad que debe tener este proceso.
Ahora, todo este esfuerzo de carácter nacional por parte de las universidades estatales, tiene que ir acompañado con un despliegue presupuestario coherente y consistente. Es decir, si las universidades en su vinculación con el territorio son también una extensión del Estado, y se hace presente en esos territorios para resolver problemas urgentes, eso tiene que ir acompañado de los presupuestos adecuados para que esas estrategias se lleven a cabo con las mejores condiciones y asegurando no solo la calidad por el lado de la academia, sino la efectividad de ese resultado para mejorar la calidad de vida de una comunidad.
Entonces, el tema presupuestarios no es solo un tema de carácter económico, también es una señal política respecto de que el Estado comprenda la gran oportunidad que dispone al tener 18 universidades que van de Arica hasta Punta Arenas, lo cual genera con una gran cobertura para poder hacerse cargo de los desafíos que tiene cada región y territorio con sus particularidades.
¿Qué otras estrategias vienen hacia adelante para potenciar el trabajo que se está desarrollando desde la Red de Vinculación Territorial?, en concreto, proyectos, espacios de trabajo colaborativo, y ¿cuál ha sido el aprendizaje obtenido?
Un primer ejemplo es el proyecto 21991, Universidades Estatales comprometidas con el Territorio, el cual tiene un objetivo base, el fortalecimiento de la red de universidades que realizan esta función esencial de vinculación con el medio, fomentando la generación de prácticas y desarrollo colaborativo.
Esto es relevante porque aquí hay un tema transversal, que es la modernización del Estado, la cual incluye a las universidades estatales, principalmente centrado en la gestión, el cual es un tema pendiente
Por ejemplo, en la Universidad de los Lagos tuvimos ocho versiones de un curso de gestión de vinculación con el medio en donde pudimos capacitar a 300 académicos, otorgándoles herramientas para diagnosticar, diseñar, implementar y evaluar proyectos de vinculación. Esa fue una práctica institucional que tuvo la colaboración de otras universidades de la Red, para entregar en conjunto, el máximo de herramienta posible a los profesores. Esa práctica colaborativa nos demostró que esto es posible, en la medida que planificamos bien y tengamos la voluntad de realizarlo.
Las distintas redes creadas, como el propio proyecto Ethos, son ejemplo de la inteligencia colectiva, es decir, de cómo ideas que surgen en cualquier universidad ya no le pertenecen exclusivamente a esa institución, sino que es un bien comunitario que le pertenece al Sistema de Universidades Estatales.
Para que este nuevo modelo de relacionamiento sea posible, tenemos que preparar a los profesionales, a los equipos de cada una de las universidades. Necesitamos instalar herramientas conceptuales y estratégicas que permitan poder levantar una cartera de proyectos distinta, en donde haya mayor participación de estudiantes, profesoras y profesores. Además, tiene que haber una coordinación entre las 18 universidades y generar una articulación al interior de cada una.
Lo segundo que quiero decir, es que son las propias comunidades universitarias, como agentes internos, los que materializan esta función tan importante para la universidad que les permite hacer presencia en los territorios a través de las funciones misionales. Son los administrativos, auxiliares, profesoras, profesores, estudiantes, directivos, con los liderazgo de rectoras y rectores, los que concretan esta tarea.
Además, esta misma tiene un mensaje súper claro, la vinculación con el medio va a la par con la historia institucional de las universidades chilenas y latinoamericanas. El tema no es si es extensión o vinculación, sino que hay que tener claro que la tarea universitaria se realiza en un espacio territorial, en la interacción con las comunidades y los gobiernos.
El hacer universidad significa entender que somos un actor más dentro de un ecosistema territorial y que requiere ser reconocido, legitimado por otros. Las universidades tienen una rica tradición e historia de relación con los territorios y que hoy día evidentemente está sometida a otros desafíos, por ejemplo, cambio climático, el estallido social, la reconfiguración política de los territorios con mayor democracia y descentralización. Es decir, un territorio es un concepto dinámico, multidimensional, en el cual debemos ponernos al día con esos desafíos, para lo cual las universidades tienen que trabajar de manera colaborativa con el fin de atender a problemáticas que son nacionales, y esas son prácticas que hay que instalar de ahora en adelante.