La académica e integrante de la red de inclusión del Proyecto Ethos, Arlett Krause aborda los ejes en los que trabajará esta mesa técnica en los próximos meses.  

La Mesa Técnica de Inclusión tiene como uno de sus ejes centrales para este año el documento que servirá de instrumento para realizar un diagnóstico en las 18  Universidades del CUECH respecto a cuál es el estado de las políticas inclusivas. Y es que como explica la psicóloga de la UFRO e integrante de la red, Arlett Krause este paso es clave para tomar decisiones.

La académica señala que “uno de los principales desafíos de la red es posicionar la inclusión en las universidades del Consorcio desde la perspectiva de derechos, de tal forma que las instituciones de educación superior seamos capaces de garantizar acceso a personas con discapacidad y neurodiversidad y asegurar la participación de estas personas al interior de las instituciones”.

Arlett Krause recalca que “el alcance que tiene el Ethos de inclusión es en los tres estamentos de las comunidades universitarias, no se reduce sólo al estamento estudiantil” y de allí que cuando se habla de éxito en el proceso esto supone que se incluya además a funcionarios y académicos.

 

"El alcance que tiene el Ethos de inclusión es en los tres estamentos de las comunidades universitarias, no se reduce sólo al estamento estudiantil".

 

La integrante de la Red de Inclusión señala como uno de los problemas basales a superar la actitud que se tiene frente al tema, pues según sus palabras “el elemento central tiene que ver con los cambios actitudinales, que son parte de la cultura institucional, esas son las barreras más difíciles de cambiar porque si bien es caro implementar un asesor, juntas los recursos y lo puedes comprar, sin embargo, la accesibilidad actitudinal tiene que ver con que comprendamos ampliamente el concepto de inclusión, que comprendamos la perspectiva de derechos y no pensemos que son beneficios para personas injustamente privilegiadas. Esas actitudes son las que más cuesta cambiar porque requieren de mucha formación”, señala. 

Por lo mismo, es que la psicóloga recalca que “hay que tener presencia de personas diversas para que el cambio de actitud ocurra” y da cuenta del impacto que genera en cada entorno la presencia de un docente o un administrativo con discapacidad. “El cambio actitudinal tiene que ver con formación, pero tiene que ver fuertemente con la posibilidad de interactuar en la vida cotidiana con personas con discapacidad y neurodiversidad, que te hacen cambiar la perspectiva y tomar la riqueza de la diversidad.